SIGUE LA DEVOCIÓN...

Sigue la devoción
por los mártires cristeros


n Con vía crucis fieles tarimorenses
conmemoran el martirio de fray José Pérez e Isidoro Tirado
n La vida espiritual de miles de feligreses de la región, gira en torno a este acontecimiento

Antonio Espino Mandujano

Cañada de Tirados, municipio de Tarimoro, Gto.- El día de ayer, a 81 años del sacrificio de fray José Pérez e Isidoro Tirado, declarados siervos de Dios por el Vaticano, entre los callejones de encrucijada se volvieron a escuchar los rezos y los cánticos de más de 500 feligreses católicos, ancianos, mujeres, niños y hombres, que encabezados por el padre Alfredo Gallegos Lara, caminaron bajo los quemantes rayos del sol, insistentes en defender la preservación de este sitio religiosos, que mitiga sus necesidades espirituales.
Ahí en la capilla que testifica en una placa de cobre, el último acto ministerial del sacerdote franciscano que murió en 1928, nuevamente el pueblo recreó una tradición que con el transcurso de los años se ha convertidos en una de las fiestas religiosas más concurridas del municipio de Tarimoro y que al medio día de ayer, congregó a un gran número de católicos para rendir homenaje al mártir cristero.

En el patio lateral de la capilla se ofició una misa por el aniversario del sacrificio que conmocionó a la localidad.


VÍA CRUCIS

Entre cantos, alabanzas y aplausos más de 500 creyentes de los siervos de Dios, se mantuvieron de pie durante la última estación del vía crucis efectuado en el lugar conocido como El Zapote, donde fue asesinado Isidoro Tirado, el viernes 31 de mayo de 1928 durante la persecución religiosa.

La gente abarrotó el lugar, en el arroyo, en las laterales del camino, en el acceso principal y en las entradas a este recinto los devotos de los mártires cristeros “oraron y cantaron, elevando su voz, refugiándose en Jesucristo por la intercesión de los mártires, para salir adelante de todos los problemas de salud y familiares que tienen”.

El padre Alfredo Gallegos Lara los invitó a cerrar los ojos para orar y les pidió su apoyo para iniciar la ardua tarea de reunir fondos para el museo y la estatua del siervo de Dios, Isidoro Tirado.
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Con voz potente indicó: “vamos a pedirle a fray José y a su fiel acompañantes Isidoro Tirado que nos ayuden a salir adelante de todos los problemas familiares que tenemos”. Mientras seguían sus instrucciones, la gente colocó en su pecho fotografías de sus familiares por quienes pedirían por su bienestar.

La gente, con los ojos cerrados y las manos levantadas, empezó a orar, mientras el padre colocaba sus manos sobre la cabeza de aquellos que identificaba más afligidos y les ayudaba a rezar.

DEVOCIÓN POR EL MARTIR

Fray José Pérez nació en Coroneo, Gto., el 24 de diciembre de 1890. Fue ordenado sacerdote en Santa Bárbara, California en Estados Unidos el 14 de julio de 1919.
En la comunidad de San José de Peña del municipio de Jerécuaro, Gto., en un muro que es un pedestal que testifica las invocaciones, en la capilla donde oficiaba el sacerdote franciscano, decenas de ex votos o retablos cuelgan de los exteriores. También se conoce que existen en paredes y puertas de las casas de los lugareños, testimonios de contenido variado que dan cuenta de la intercesión milagrosa por curar enfermedades terminales, accidentes presuntamente fatales, de situaciones de pobreza por cambios climáticos desfavorables que han sido resueltos por las bondades de fray José Pérez.
Es la fe de los feligreses católicos de esta región, la gente humilde, la que padece pobreza y miseria, y que orando hace que su vida espiritual gire en torno a la memoria de los mártires cristeros, con la esperanza de que pronto sean elevados a los altares.
VOX POPULI
El señor Bernabé Tirado, mencionó “que varias personas se encomiendan a Isidoro y frecuentemente se ven visitantes en el lugar donde murió, dejando flores, veladoras, exvotos y hasta limosnas”. Algunas personas visitan el lugar cada mes,” por eso es necesario que ya nos demos a la tarea de ponerle su estatua a este lugar”, señala.

La señora Benita Centeno, comenta que “desde 1982, cada día último de mes, se viene celebrando una misa en el templo de Nuestro Padre Jesús, por la beatificación de fray José Pérez y su fiel acompañante Isidoro Tirado”.

Doña Anastasia Ortiz, dice que la gente siempre animada por el padre Alfredo Gallegos, cada 31 de mayo, celebra “el rezo del vía crucis comenzando cerca de la cruz, en el lugar conocido como El Cajón, donde tomaron presos a los mártires cristeros”. Los feligreses pasan por el antiguo camino real hasta el lugar donde Isidoro fue asesinado, continuando por la calle Pino Suárez hasta el templo donde se celebra la misa. Durante el recorrido, entre estación y estación, la gente va orando y cantando salmos penitenciales donde se menciona la historia del martirio del franciscano y su fiel acompañante, manifiesta.


PIES DE FOTO:

· 1.- El padre Alfredo Gallegos, principal promotor de la causa de beatificación de fray José Pérez y del tarimorense Isidoro Tirado.

· 2.-Lugar conocido como El Cajón donde tomaron preso al sacerdote franciscano.

· 3.- La Cañada de Tirados, donde fray José Pérez ofició su última misa.

· 4.-Entre rezos y cantos fieles tarimorenses conmemoraron el 81 aniversario de la muerte de fray José Pérez y su fiel acompañante Isidoro Tirado

· 5.- Vía crucis en donde participaron más de 500 feligreses tarimorenses encabezados por el sacerdote Alfredo Gallegos, mejor conocido como El padre pistolas.